sábado, 24 de septiembre de 2011

DÍA MUNDIAL de las AVES – TXORIASTEA


Un año más, SEO/BirdLife Donostia conmemora el Día Mundial de las Aves con la Txoriastea – Semana de las Aves, que este 2011 cumple su 7ª edición.

De nuevo intentaremos ofrecer un programa variado que acerque y sensibilice a nuestra sociedad hacia el respeto y conservación del Medio Ambiente y la Biodiversidad, desde nuestra perspectiva ornitológica.


El programa incluye actos que ya se vienen celebrando, pero en esta semana que culmina en el señalado Día, se concentran las actividades. Este es el programa que os ofrecemos:

Celebración de VII Semana de las Aves-Txoriastea 2011
SEO/BirdLife Donostia

Día 17 de Septiembre sábado.

19:00 h: Charla sobre la migración de las aves (SEO/Birdlife, Gorosti y Aranzadi) “Nacieron para volar libres”. En Etxalar (Navarra)

21:00 h: Cena de intercambio de conocimientos de aficionados y especialistas, abierta al público en general
Lugar: casa de cultura de Etxalar y Posada de Etxalar-Etxalako Ostatua.

Día 18 de septiembre domingo.

9:00 h: Observación de aves en migración en el alto de Lizaieta (Etxalar). Instalación de varios telescopios a disposición del público interesado y presencia de guías y expertos de SEO-BirdLife (Sociedad Española de Ornitología), Gorosti, Proyecto Lindus y LPO (Ligue pour la Protection des Oiseaux).

Fin de semana del 23, 24 y 25 de Septiembre.
Migración de las aves. Burguete: Collado de Lindus.

Día 25 de septiembre domingo.

9:00 h: Observación de aves en migración en Lindus. Instalación de varios telescopios a disposición del público interesado y presencia de guías y expertos de SEO-BirdLife (Sociedad Española de Ornitología), Gorosti,  LPO (Ligue pour la Protection des Oiseaux) y de los propios responsables del Proyecto Lindus.


Día Mundial de las Aves


Día 28 de Septiembre miércoles.


19:00 Joaquín Araujo Charla y coloquio en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Donostia – San Sebastián bajo el título: “El papel de las Aves en la Cultura acompañándose de la proyección de la película ”Arte del Aire”.

Día 30 de Septiembre viernes.

18:00 Charla coloquio sobre “Gestión forestal en Bertiz: Bosques maduros y árboles viejos, fuentes de Biodiversidad”, por técnicos del Gobierno de Navarra, Asociación “Árboles Viejos”, Gorosti y SEO-BirdLife.

Día 30 de Septiembre viernes.

De 17 a 19 horas Taller infantil sobre papiroflexia, pinturas etc. de aves en la FNAC de Donostia.



Día 1 de octubre sábado.

De 10 a 12:30 Paseo ornitológico en bicicleta con KALAPIE . Salida desde el Kubo grande del Kursaal. Dos puntos de observación de aves con telescopios.

De 18:30 a 21:00 mesa informativa en la Calle Loyola

Día 2 de octubre domingo.
De 10 a 14 horas Mesas informativas en el Bulevard donostiarra y Parque Ecológico de Plaiaundi.

Tanto en los talleres, paseo ornitológico en bicicleta, etc. Se repartirán camisetas y gorras conmemorativas entre los niños y monitores.


Como parte fundamental en nuestra dinámica, buscamos la participación y colaboración con otras entidades, sociedades e instituciones. En esta 7ª edición no podemos dejar de nombrar a Sociedad de Ciencias Naturales Gorosti, LPO (Ligue pour la Protection des Oiseaux), Aranzadi,  Club Kalapie, Fnac Donostia y Ayuntamiento de Donostia, que ha cedido su Salón de Plenos para la disertación de Joaquín Araujo, y a él por la gentileza en atender a nuestra invitación.

sábado, 17 de septiembre de 2011

ESPÁTULAS en PLAIAUNDI


Durante la tarde del viernes 16 empezaban a llegar bandos y sobre las 5 una compañera cuenta aproximadamente 80 ejemplares en la laguna principal (S. Lorenzo). Sin pretenderlo otras dos compañeras, toman el relevo,  registrando la llegada de pequeños grupos y, ya anochecido, abandonamos el humedal dejando dos centenares de ejemplares en la laguna y la esperanza de que al volver el sábado algunas sigan allí.


Con emoción, y cierta nocturnidad, nos asomamos a las troneras de los observatorios y nos encontramos con la enorme sorpresa de que el número de espátulas es casi cuatro veces mayor, entre 685 y 700 ejemplares. Ocupan una buena parte de la lámina de agua y la exuberante vegetación de las orillas impide tener una perspectiva completa, impidiendo un conteo más preciso.


Desatados anotando las anillas que portan muchas de ellas, no perdemos la vista de un espectáculo natural de este calibre. Una concentración de espátulas de esta magnitud nunca había sido observada en nuestro pequeño y acosado humedal. El estrépito de los aviones altera la tranquilidad de las blancas migradoras. Se van sucediendo las “levantadas” generales y en cada volada son menos los ejemplares que vuelven al vaso lagunar. Como una ruidosa lima, cada operación del aeropuerto, va rebajando en tamaño el volumen de espátulas hasta que, a las 11 y poco de la mañana, vemos partir al grupillo de las 13 últimas.


Atardece el sábado y un centenar de estas hermosas aves, repone las fuerzas imprescindibles para proseguir su viaje. Han ido llegando durante la jornada y esperemos que reemprendan su travesía con las energías restablecidas y no con el corazón alterado. Que no sea el miedo el motivo por el que partan precipitadamente.
Continúa el tiempo lluvioso y no sabemos que nos depararán los próximos días, aunque es claro que lo visto difícilmente podrá ser superado.
 

martes, 13 de septiembre de 2011

9 de SEPTIEMBRE en…


Situado frente al Portillo Granada, a un par de kilómetros al oeste del puerto de Ibañeta, a 3.000 metros, a vuelo de pájaro, de la colegiata de Orreaga-Roncesvalles y a 1.216 metros s.n.m. Esta jornada festiva en Gipuzkoa, nos ha traído, una vez más, a este estratégico punto en el paso migratorio de muchas especies del centro y norte de Europa, camino de sus cuarteles de invernada en África.


Las previsiones metereológicas no podían ser mejores: Cielos despejados y suave viento del Sur.
Cargados con mucha ilusión y entusiasmo, los trastos de mirar, los de sentarse, los bocatas y un buen acopio de agua fresca, subimos los 500 metros, desde el aparcamiento hasta la loma que fuera atalaya militar napoleónica. Hoy, ya lejanas las contiendas bélicas, es apostadero inmejorable desde donde observar el cruce de la frontera pirenaica por un importante contingente de aves, al igual que hacen los peregrinos xacobeos por tierra.


Al llegar arriba nos encontramos con los voluntarios que cubren el proyecto Lindux, llegados ex profeso desde muy distintos orígenes. Ellos cubren jornadas de 11 horas seguidas de observación, día tras día, para obtener un censo riguroso del paso migratorio por este collado. Tras los saludos cordiales nos ponen al corriente de las últimas novedades, las pocas novedades. Los dos días anteriores, pese a presentar idénticas y prometedoras perspectivas, se han saldado con una lista extremadamente corta. En esto no hay reglas fijas y si hay que esperar, esperaremos, que para eso hemos venido.


Un Aguilucho lagunero, macho, identificado de inmediato por los ojos expertos, aparece por el frente y en pocos aletazos rebasa nuestra posición. “Ha cruzado” canta el responsable del grupo. También nosotros hemos cruzado el horizonte pesimista y sentimos que esto se va a animar. Los Buitres leonados, con su imponente envergadura, vuelan sin esfuerzo sobre promontorios y vaguadas. Pasan tan cerca que sus sombras casi nos alivian de los rayos del astro abrasador.


Pero las horas van pasando y lo que crece no es el número de migradoras, sino los grados de temperatura. Un sol de justicia va buscando su zenit, pero impertérritos como las moles de la cordillera que se ven en la distancia, soportamos el calor y buscamos refrescar los ánimos con comentarios jocosos:

“¿Qué es un Tringa tontainus? … Un Archibobo común.”
“¿Cuál es el pato más español? … El Porrón pompero.”




Pero la relajación es solo aparente, y alguien avisa: “Las reales en vuelo”. Como un resorte todos nos incorporamos y clavamos las miradas para no perder detalle. Sabiéndose admiradas, la pareja de Águilas reales residentes en la zona, que acostumbran a permanecer posadas en una cresta rocosa a más de 2 Kilómetros, han decidido hacer unos vuelos acrobáticos a unos cercanos 500 metros. Es emocionante y nos resulta breve el espectáculo y pronto volvemos a las posiciones de “descansen”.


A estas horas y con todo tan parado, lo mejor que se puede hacer es dar cuenta de los bocatas e intentar alejar de la mente la negativa idea de que hoy no va a ser un día memorable. El crooock, crooock, de una pareja de Cuervos casi es una nana que invita a la siesta, mientras nos mece una brisita que no refresca, pero agrada.


Pero no va a ser Morfeo quien nos gane la partida. Son casi las 4 y un Abejero pasa por la izquierda, recortando su silueta sobre el horizonte del Larrun.



Tras de este ejemplar no viene un vacío y de inmediato otro punto del horizonte se convierte en un precioso macho de Aguilucho cenizo, que nos mira con curiosidad cuando pasa a nuestra altura.



Otro Abejero, de un grupete de 6, toma la iniciativa y se decide a cruzar la “muga”.



Sus compañeros van ganado altura y también se deciden a traspasar la barrera.


Alguno ignora nuestra presencia y nos sobrevuela, permitiendo que admiremos su belleza y aumentando más aún esta pasión y respeto que sentimos por las aves.



Esto ha empezado y tanto el calor como la apatía, se van tras el vuelo de estas rapaces. Otro lagunero pasa cerca, algún Alcotán y más y más Abejeros.


Mientras controlábamos a un pequeño enjambre de Abejeros alguien cantó “otra pescadora” y esta nos apareció de repente, dejando que el sol que empezaba a declinar, sacara a relucir su blanquinegro plumaje.



Ilargi-Selene tampoco quería perderse el momento y, viéndola por el rabillo del ojo, nos avisaba que pronto sería ella la reina del firmamento.


Con el sol ya próximo a las suaves lomas del poniente, más Abejeros rebasaban la puerta de entrada a la península alumbrados por una cálida luz horizontal.





Ya es hora de ir recogiendo todos los pertrechos e ir emprendiendo el camino de regreso. Los telescopios en las fundas, trípodes y sillas plegados, pero los ojos dispersos por las lomas y el infinito, pues aún siguen pasando alas sobre nosotros. Desde la orilla del sendero de descenso, otro Abejero, otra pescadora, desde el aparcamiento un joven cenizo y otro más. Los aviones zapadores y comunes que todo el día han pululado por las cimas, también se retiran, mientras tratamos de intuir dónde pasarán la noche.

Al final repasamos lo visto, sin apuntes y con el placer de evocarlo:
Poquitos paseriformes, con algunos fringílidos s.p., Mosquiteros comunes (escuchados) y un bandito de 8 Lavanderas boyeras. Las rapaces coparon todo el protagonismo:
7 Águilas pescadoras, 5 Alcotanes, un peregrino (Halcón), unos 10 Aguiluchos, entre cenizos y laguneros, una hermosa Águila culebrera, que casi se nos va sin verla, un par de Milanos reales, la “Reales”, dos calzadas, algún Cernícalo y entorno a 80 Pernis.

Alguien apuntó que no vimos ninguna Cigüeña negra como argumento para volver pronto, como si nos hiciesen falta razones para volver…

En resumen, una preciosa jornada en este “punto caliente” del Pirineo Navarro, disfrutada en grupo y de la que queremos haceros partícipes desde aquí.
Nos reservamos para nosotros el soñar esa noche con las evoluciones de tan magníficas criaturas.


Juanjo, Zuriñe, Judith, Mikel, Joseba, Jorge, Ricardo, Joselu y Xabier

Un día más de un año más, desde las trincheras de la pasión asomamos nuestros cañones de cristal, en busca de la Libertad en forma de alas”   

domingo, 11 de septiembre de 2011

Espátulas y limícolas en Salburua


Cada día nos acercamos un poquito más al otoño en el humedal de Salburua y se nota. Mañanas con esa niebla densa que define a la Llanada y que hace presagiar días despejados y llenos de luz.

Combatiente
Aquí también se pueden ver las migraciones de aves en perfecta coordinación con lo que nos dice que se anotan algo más al norte. Cientos de Papamoscas cerrojillos y grises, Carriceros, Mosquiteros comunes y musicales. Los últimos grupos de Aviones zapadores que se detienen un momento comen y siguen su camino mezclados con algunos Aviones comunes.


Archibebe claro
También se ven de vez en cuando Vencejos comunes rezagados y alguna Golondrina. Por cierto que sigue por aquí la albina (leucística) que parece encontrarse a gusto.

Andarríos bastardo
Las acuáticas siguen con sus plumajes eclipsados. Azulones, frisos, cucharas, Porrones europeos y moñudos. Alguna Cerceta común.

Los cangrejos americanos que tan poco nos gusta al ser una especie alóctona es bien aprovechado por Espátulas, Cigüeñas, Garzas reales alguna imperial que cae por aquí, Cormoranes grandes y Garcetas comunes. Ya se pasean sueltos los pollos de Focha, Gallineta, Zampullín común y Somormujos.


Hoy hemos dado un paseo para enseñar las aves limícolas a los vitorianos dentro de las actividades que SEO/BirdLife desarrolla para el Centro Ataria del Ayuntamiento de Vitoria. Un grupo numeroso que ha podido disfrutar de: Agachadizas, Andarríos grandes y chicos, un nutrido grupo de Combatientes y alguna Avefría. Se ha visto incluso algún Correlimos común, aunque han faltado aves que se han visto estos días: Andarríos bastardo, Archibebe claro y Agujas colinegras.



Los grupos de Espátulas siguen usando el humedal para reponer fuerzas, algunas nacieron en Francia y otras llevan anillas holandesas. Todos los días se ven pequeños bandos que se alimentan cerca de los observatorios haciendo las delicias de los aficionados a la fotografía. Las Cigüeñas presentes son las que pasarán el invierno con nosotros y grupos de Estorninos negros se ven mezclados ya con los pintos.

Los Abejarucos se fueron.

jueves, 8 de septiembre de 2011

UN JOVEN MONACHUS


Recientemente publicábamos el desafortunado final de un ejemplar de una de las especies de aves más escasas y amenazadas de nuestro continente, el Guión de codornices.  Ave discreta por su tamaño y el entorno en el que desarrolla su existencia y que, unido a su reducida población hacen que sea muy improbable verla.

Nuevamente es nuestro compañero Fernando Pinto quien nos trae la noticia de la aparición de otra especie que comparte bastantes aspectos en cuanto a su estado de conservación y lugar inesperado donde ha aparecido, el aeropuerto de Bilbao.


Evidentemente no es su pequeño tamaño la causa de que no lo veamos con frecuencia. Es su bajo número de ejemplares y que su área de distribución quede un poco alejada de nuestro territorio, lo que impide que podamos avistarlo sobre nuestros cielos, salvo ocasiones excepcionales.

Es reconfortante saber que, pese a que este ejemplar presenta claros signos de desnutrición, está en las buenas manos del personal del Centro de Recuperación de Fauna de Gorliz, y allí no se escatimarán los medios necesarios para que vuelva a recuperar su libertad, en plenas condiciones.


El Buitre negro (Aegypius monachus), en su juventud, realiza desplazamientos alejándose de su lugar de nacimiento. Estos derroteros por territorios desconocidos se conocen como “dispersión juvenil” y eso es lo que ha debido de traer hasta aquí a este ejemplar.

Los esfuerzos aplicados a su conservación y la progresiva mejora de las reintroducciones que se están llevando en el Pirineo, nos hacen albergar la esperanza de que, más temprano que tarde, podamos disfrutar de su majestuosa presencia desafiando al viento sobre nuestras cabezas.


Cita y fotos de Fernando Pinto Velasco, Técnico de Medio Ambiente del Aeropuerto de Bilbao, Loiu, quien ha solicitado autorización para anillar este ejemplar con anilla oficial de MARM

domingo, 4 de septiembre de 2011

ALTOS de BARAHONA


Una jornada campera por la "estepa" del sur de Soria en busca de la Alondra ricotí o de Dupont, resultó muy grata e interesante en avistamientos, a pesar de que el aláudido no quiso dejarse ver. Los páramos elevados de esta comarca constituyen uno de los enclaves más importantes para la supervivencia de esta peculiar Alondra, que es una de las aves más escasas y en el continente europeo solo está presente en territorio español. Pero no  solo ricotís  pueblan estos campos y despiertan el interés de los aficionados a la observación de la fauna, en especial de las aves. 43.000 hectáreas de ZEPA avalan este valor ornitológico.


La primera observación de importancia fue de un bando con 17 Sisones divisados al vuelo. Seguimos con la vista los destellos blancos de su trayectoria, hasta que pararon en un rastrojo. Con extremado sigilo, conteniendo los nervios y la emoción, llegamos hasta el lugar, donde los pudimos observar más detenidamente. Los machos aún conservaban en sus cuellos plumas de la pasada estación reproductora.  



Un poco después, muy cerca de los Sisones, nos llamó la atención otro bando, pero con aves de tamaño notoriamente mayor que los Sisones. No podían ser otra cosa que Avutardas. Menos mal que la adrenalina se disuelve con la caminata por el rastrojo, porque nos hubiese costado sobrellevar otro “subidón”.
Conociendo la extremada timidez de esta especie, nuestra aproximación requería de mayor cautela y se hace difícil, no por las condiciones del terreno sino por retener las ganas de salir corriendo hacia ellas. A una distancia prudencial, por no molestarlas ni estropear el avistamiento, logramos observarlas con suficiente tranquilidad, para ellas y para nosotros.

El grupo estaba formado por 22 ejemplares. Casi todos eran machos jóvenes de buen porte y precioso plumaje. Estos “grupos de solteros” deambulan por territorios algo alejados de las zonas de reproducción, alimentándose de variados tipos de plantas, con predilección por una leguminosa forrajera, la Veza, sin desdeñar pequeños invertebrados que queden al alcance de su pico. Comprobamos que donde ahora estábamos nosotros, recientemente habían estado ellos. Plumas desprendidas y huellas de sus pisadas eran un rastro inconfundible.


Nos alejamos con el mismo cuidado con el que que nos habíamos aproximado. Ya más serenos, pensando en la suerte que habíamos tenido al poder contemplar a estas Avutardas sin el empleo de escondites y largas horas de espera en puntos querenciosos, cuando un Aguilucho cenizo se cruzó en el camino. Tras un revoloteo, como el de una enorme mariposa roja,  se lanzó contra el suelo.


No debía ser grande la pieza capturada ya que le duró poco. La consumió en pocos picotazos y no pudimos apreciar ningún resto entre sus garras, pese a la relativamente corta distancia en la que tuvo lugar el lance. Es muy reconfortante para cualquier amante de la naturaleza ser ignorados por los animales silvestres, que no nos perciban como una amenaza y continúen con su vida como si no existiéramos. En esta ocasión, a este joven de cenizo, le debimos cuasar la misma alarma que cualquier otra cabeza de ganado, ya que no tuvo reparos en cazar a escasos metros de nuestros “bultos”.


Todo el paseo estuvo salpicado por la presencia de Alcaudones comunes. Sobre los majuelos, los escaramujos o sobre cualquier montículo de piedras. La abundancia de insectos, grandes y medianos, parece indicar un uso no excesivo de insecticidas y esto permite que muchas especies encuentren sustento con cierta facilidad. Entre estas especies de aves, que dan buena cuenta de este recurso, están las cuatro que protagonizan esta salida por un espacio de escasa presión humana, los alrededores de “Barahona de las Brujas”.


Javier M. Olmo