viernes, 31 de enero de 2014

“De Itoiz a Zilbeti”



Los que nos movemos en el mundo de las preocupaciones conservacionistas nos empeñamos en la búsqueda del bienestar social, a través de un reparto más equitativo y justo de los recursos, de forma compatible con la preservación de nuestros paisajes, envidiados por su naturalidad.

Esta idea de conservación choca con la concepción política del término, porque lo conservador  se relaciona con la querencia a mantener sin cambios la estructura política, ideológica y económica, en la preservación de los privilegios de unos pocos sobre los derechos de sus convecinos. Es decir, se asocia lo conservador con lo tradicionalista, lo continuista y lo carca. Y lamentablemente, en los episodios que me propongo comentar es difícil encontrar argumentos que contradigan estas concepciones.

En los últimos años, la sociedad navarra observa, desde la comodidad del tresillo, cómo se degradan sus paisajes en función de los intereses de unos pocos con planteamientos desarrollistas totalmente miopes, convencidos por las maquinarias mediáticas de que nuestra gestión medioambiental es ejemplar. La sociedad civil que apoyó la Constitución de 1978 no fue capaz de descubrir que seguíamos con los mismos pliegues que impedían cambios sustanciales en los modos, permitiendo que el clientelismo y la corrupción preconstitucional se perpetuaran  apenas barnizados.

Los atisbos de rebeldía social que se vivieron en Navarra con la oposición al embalse de Itoiz, fueron capaces de poner momentáneamente en apuros a todo un aparato político enfermo de prepotencia, pero fracasaron en la pervivencia de los inamovibles intereses preconstitucionales. El resultado de este gran esfuerzo social decepciona porque las campañas oficiales de descrédito consiguieron establecer en la opinión pública el convencimiento de la inutilidad de cualquier resistencia al ilimitado poder del Gobierno local. Lo que realmente era la exhibición espontánea de la defensa de nuestros paisajes se supo presentar como pantalla que ocultaba oscuros intereses más relacionados con el antisistema que con la cultura navarra.  


Esta actitud apática y de abandono ha sido una dificultad adicional en la defensa de los bosques de Zilbeti. Pero aquí la movilización social de sus defensores no ha sido masiva sino puntual, paciente, trabajadora, incansable, tozuda, sorda y su éxito se debe a la fuerza de su humildad y a los ingeniosos fogonazos que han llegado a conocerse impulsados por la sencillez de sus formas dentro de la densidad de los mensajes. 

Esta promoción minera, la de Zilbeti, empezó con una declaración de agotamiento de la mina de Azkarate, en Eugui, y la necesidad de buscar mineral en nuevos yacimientos. Junto con esta revelación, se nos afirmaba que todo el mineral estaba dentro de los espacios protegidos de la Red Natura y que su extracción era la única oportunidad de la empresa minera dicho “con autentica desesperación ante la agonía industrial “(sic). Inmediatamente del Gobierno navarro se vuelca en un apoyo sin recato alejado de la imparcialidad que debe demostrar la Administración ante un trámite en donde no puede ser juez y parte.

La verdad es tozuda y el tiempo nos ha dado la razón a los que siempre hemos sostenido que existe suficiente magnesita de buena calidad fuera de la Red Natura y que la supervivencia de la empresa de Zubiri no depende del acceso al mineral, sino a causas relacionadas con la gestión empresarial, los márgenes comerciales o los mercados. A tal efecto Magnesitas de Navarra acaba de presentar un proyecto de ampliación de su actual mina en Eugui, fuera de los espacios protegidos, con mineral suficiente para más de 33 años. De tal forma que la obligación legal de renunciar a la mina de Zilbeti puede convertirse en una escusa para justificar la aplicación de ajustes laborales a los que parece tener que someterse sin remedio.

Itoiz salió adelante por ser una obra pública pagada con los recursos de todos, dentro de un clima en donde no se entiende el desarrollo económico desligado  de los grandes proyectos públicos y en donde la rentabilidad futura no se mide salvo en función del interés inmediato. Zilbeti por el contrario es un proyecto privado, financiado con fondos privados, sin desdeñar las ayudas públicas, pero dentro de la misma concepción de crecimiento económico basado en la explotación de recursos estén donde estén, protegiendo los mismos intereses políticos rancios, basados en el trueque de canonjías y sinecuras, irracionales e injustas. Pero tanto, antes en Itoiz y ahora en Zilbeti, sometidos al mangoneo de gestores y técnicos administrativos duchos en interpretar las reglas del estado de derecho en beneficio de las consignas que reciben.

Una vez reconocidas las reservas localizadas en Eugui, fuera de la Red Natura, el interés de Magnesitas por Zilbeti es menor y el Gobierno navarro dispone de suficientes argumentos para no violar los espacios protegidos, teniendo la posibilidad legal de suspender el proyecto aunque solo sea  por la caducidad real de las autorizaciones. Sin embargo un paso atrás en estos momentos sería una decisión política elegante pero incómoda, porque se perdería el espíritu de Itoiz reconociendo que cuando la sociedad civil se empeña, nuestros gestores políticos no pueden actuar  imponiendo caprichosamente su voluntad por el solo motivo de hacer uso del poder que les hemos otorgado.

Zilbeti ha conseguido lo que Itoiz no pudo completar. La humildad de los pequeños pueblos pirenaicos navarros han sabido ponerse enfrente de los egoísmos oficiales cegatos y ha llegado el momento de filtrar hacia la conciencia pública los resultados conseguidos haciendo posible que la sociedad se cargue de ilusión sabiéndose capaz de impedir las tropelías del pasado. 


                 Gasteiz – Iruña 28 de enero 2014


 Texto íntegro de la carta publicada en Diario de Noticias de Navarra, en la sección Tribuna Abierta, del día 29/01/2014 y que está firmada por:
Ramón Elosegui Borinaga
Delegado Territorial de SEO/BirdLife en Euskadi y Navarra

domingo, 26 de enero de 2014

IMMER, STELLATA, ARCTICA



Son tres las especies de Colimbos que podemos llegar a ver en nuestras latitudes costeras durante los meses de invierno: Colimbo grande (Gavia immer), Colimbo chico (Gavia stellata) y Colimbo ártico (Gavia arctica). Ninguna de las tres especies es abundante entre nosotros, aunque es más frecuente de ver al mayor de ellos, al Colimbo grande.

Sus nombres, en castellano, ya nos hablan de su corpulencia, siendo el mayor el C. grande (casi del tamaño de un Cormorán grande) y el más pequeño el C. chico. El C. ártico viene a tener un tamaño intermedio, aunque más cercano al del C. chico.


En librea nupcial, sus rasgos de identificación resultan más patentes que cuando lucen el más discreto plumaje de invierno. También debemos tener en consideración que la mayoría de los Colimbos que vemos en nuestras costas y estuarios son ejemplares jóvenes, cuyo plumaje de primer invierno tiene matices diferentes al de los adultos en librea invernal o de descanso.


Ciertamente son especies de aspecto muy parecido, especialmente en invierno, pero intentaremos señalar aquellos rasgos que ayudan a diferenciarlos, guía para el neófito y recordatorio para los más avezados.

PICOS, CABEZAS y CUELLOS


Colimbo grande:
- Pico robusto y recto
- Cabeza vista a menudo con protuberancia frontal
- Cuello más grueso que en las otras dos especies y con una cuña blanca que entra desde la parte delantera clara hasta la trasera oscura, creando una línea irregular entre las dos partes de su cuello.

Colimbo ártico:
- Pico algo más fino y recto
- En ocasiones eriza la parte frontal de su cabeza, aunque no llega a presentar una protuberancia tan destacada como el C. grande.
- Cuello más fino que el C. grande y con una separación oscuro-claro mucho más regular, salvo una pequeña cuña oscura, muy sutil, en dirección a la garganta, que no siempre es apreciable.
                             
Colimbo chico:   
- Pico fino y con ligera curvatura hacia arriba. Esto se acentúa por la inclinación hacia arriba de su cabeza.
- No presenta erizamiento de las plumas de la cabeza, por lo que tiene un aspecto más estilizado.
- El tono de la parte oscura de cabeza y cuello, es de un gris más pálido que en las otras dos especies, aunque esto es complejo de apreciar en función de la luz o lo mojado del plumaje. En los juveniles la línea de separación claro-oscuro no presenta irregularidades aunque sí un aspecto difuminado. En los adultos, la parte clara se extiende hacia la nuca.




En estas tres fotos, vistas desde un ángulo muy parecido, podemos apreciar las diferencias de aspecto de las tres especies. Luz y distancia influyen en la claridad con la que podemos apreciar sus, en ocasiones, sutiles diferencias.
Vistos de perfil, podemos seguir apreciando las diferencias que les caracterizan, llamando la atención sobre los característicos  paneles blancos, en la parte trasera de los flancos, del C. ártico. Estos paneles, ausentes en las otras dos especies, no siempre son visibles, ya que los Colimbos nadan con distintos grados de inmersión, llegando a hacerlo con todo el cuerpo sumergido.





Como curiosidad sobre estas especies, decir que el Colimbo chico está considerado como el más común en la mayoría de las regiones donde se reproduce e inverna. Que el Colimbo ártico es el que ocupa una mayor extensión continental europea para sus áreas de cría, solo que acostumbra a invernar sin gran desplazamiento migratorio. Pese a ser la especie que más nos visita, el Colimbo grande, en Europa, tan solo se reproduce en Islandia y en un limitado número que ronda las 300 parejas. Este último, el C. grande, es un ave muy escasa, por lo que está incluido en el Anexo I de la Directiva de Aves Europea.

Por lo que hemos podido observar, los Colimbos encuentran nutritivo alimento en nuestras aguas costeras, lo que es bueno para su supervivencia.


Las fotos han sido tomadas en Pasaia y en Txingudi, durante los inviernos 2012-13 y 2013-14
Autores: Joselu G. Quintas, Alfredo Valiente, Javier M. Olmo y Xabier Garate

domingo, 19 de enero de 2014

Grullas II parte



En esta II parte sobre las grullas, nos centraremos en la migración de estas bellas aves. En Gipuzkoa los primeros bandos pequeños de grullas se pueden empezar a ver a finales de Septiembre. Pero son los meses de Octubre y sobre todo Noviembre los meses fuertes de paso posnupcial, variando según las condiciones meteorológicas y la disponibilidad de alimento. Mientras que para el paso prenupcial, las más tempraneras comienzan a moverse a finales de Enero, siendo Febrero el mese de más actividad, siempre que hablemos de los ejemplares más nordicos. Estos ejemplares necesitan dos meses para llegar a los zonas de cria, que tiene lugar entre los meses de Abril y Junio.
Las grullas se reproducen a partir de los 3-5 años y la preja se une de por vida.





En estos últimos años se ha podido observar en Alemania, que miles de estas grullas se quedan a invernar en la misma zona de cría, es decir, que no migran. Otras en cambio unas 50.000, finalizan su migración en Francia (Aquitania, zona centro y Ardenne-Champagne), esta ultima cifra va en aumento por varias razones.
Una de las razones de este aumento seria que estos países han creado o acondicionado zonas idóneas para el reposo y alimentación. Otra de las razones podría ser, que los inviernos son más suaves en la actualidad, así como la prohibición de su caza.
Sin embargo el numero de ejemplares de grullas que llega a la península, también va en ascenso. En 1980 llegaban unos 20.000 ejemplares mientras que en el año 2010 fueron 150.000 los ejemplares que utilizaron la península para pasar el periodo invernal. En Alemania unas 7000, en Francia 50.000, en Portugal 6.000 y 1.000 en Marruecos.





 En Europa, el país más cercano a nosotros, donde crían las grullas, es Alemania, aunque en Francia han comenzado a criar unas pocas. Los países donde cría de mayor a menor numero de parejas seria : Rusia, Suecia, Finlandia, Polonia, Alemania, Noruega, Letonia, Estonia, Bielorrusia, Lituania, Ucrania, Turquía, Dinamarca, Armenia, Republica Checa, Georgia, Gran Bretaña, Francia, Rumania y Holanda.
En Alemania se están solapando las zonas de cría e invernada, un comportamiento entre las grullas, que no había ocurrido hasta ahora.



 Si nos retrotraemos al siglo XX, la mayor parte de las grullas cruzaban el estrecho de Gibraltar, para invernar en África. Cuando en la península comenzaron a aclarar zonas boscosas, además de la expansión del cereal de secano y posterior regadío, dieron lugar a zonas ideales para que las grullas pasaran el invierno en la península. En Francia comenzaron a invernar algunos ejemplares hacia 1973.
En el año 2010 se estimo que utilizaron la ruta migratoria occidental, unas 220.000 grullas, cifra que triplica al de 1992. Un aumento de unos 9.000 ejemplares por año, aumento que coincide con el detectado en las zonas de cría.



 La migración de las grullas en España y Francia es de Sur-Oeste en pos nupcial y de Norte-Este en el periodo prenupcial (Se concentran en el embalse de la Sotonera en Huesca). Utilizan principalmente tres rutas :
1) La Oriental : Se dirigen al sur por Rumania, Bulgaria y Turquía. Después continúan bordeando la costa mediterránea por Siria, Líbano e Israel (donde se detienen para descansar).
2) Esta otra ruta comienza en los países de Finlandia (lago Vassa), Rusia central, Republicas bálticas y se dirigen hacia el sur. Algunos de estos ejemplares cambian el rumbo hacia el Oeste, para juntarse con los ejemplares que proceden de Polonia, pero la mayoría de ellos continúan hacia el sur, llegando al mar Adriático, donde se separan. Unos se dirigen hacia Nápoles y Sicilia para llegar a África. El resto sigue al sur de Grecia, pasando por la isla de CRETA, hasta Egipto.
3) Las grullas que cruzan nuestros cielos, con su característico trompeteo, provienen de Suecia (Región de Skaraborg, entre los grandes lagos de Batterm y Barem.
En agosto se concentran en el lago Hormborga y comienzan su viaje hacia el sur, junto con las Noruegas y algunas Finlandesas, para descansar en la isla de alemana de Rugen. En esta región se juntan con algunos ejemplares que proceden de Dinamarca y Polonia.
De esta Isla alemana, se dirigen hacia Francia, donde se detienen a descansar en la región de Champagne-Ardenne, en lagos como el de Derchatecoq, Orient, du temple y Amanca. Otros elegirán la zona de Arjuzanx, para su parada migratoria. El corredor francés es : Lorena/Champagne-Ardenne/Borgoña/Centro/Limousin/Aquitania.
La etapa más dura es atravesar los pirineos, para llegar a Gallocanta. De Gallocanta a Extremadura. Unos pocos ejemplares se dirigirán a la región portuguesa de Estrenoz, así como a Castilla-león, Castilla la mancha y Andalucía. Las más valientes llegaran hasta Marruecos, en concreto, al rio Massa.



Por ensalzar algunas de las cualidades de estas increíbles y enigmáticas aves, podríamos destacar su capacidad de vuelo, unos 800Km por día, aunque lo normal sean unos 300 Km, dependiendo de la velocidad (23-83 Km/h) y dirección del viento.  Pueden llegar a alcanzar una altitud durante el vuelo, entre 200 y 2.000 mts.
En las dos siguientes imágenes se pueden observar dos curiosidades poco frecuentes. En el primero unas callosidades formadas en la cabeza y en la segunda el color amarillo del iris.


Las grullas son aves omnívoras, se alimenta tanto de vegetales, como raíces, bulbos, larvas de insectos, frutos, anfibios, patatas, etc.
Durante la migración posnupcial  coinciden con el periodo de maduración del maíz y su cosecha, formando parte esencial de su dieta. En Extremadura coincide también con el Trigo, Avena, Bellotas y Frutos.
En algunos países como Suecia, son alimentados con cereales, para que así dejen intactos sus cosechas.

miércoles, 8 de enero de 2014

Grullas (Grus grus, Kurrilloak)

 
Nuestro compañero Joselu, lleva a sus espaldas, desde hace unos cuantos años, el seguimiento y lectura de anillas de las grullas del la zona de San Martin de Seignanx, dentro del departamento de los Pirineos atlánticos (64).
A lo largo de estos años ha obtenido unos datos muy interesantes, así como la satisfacción que supone comprobar que un año tras otro, las grullas han superado las múltiples adversidades que han de superar a lo largo de su vida.

 
La lectura de anillas se realiza de la siguiente forma. Primero, viendo el ave de espaldas a nosotros, se empieza por la pata izquierda y luego la derecha, al mismo tiempo se lee de arriba a abajo. Las grullas llevan 6 anillas (3 en cada pata) y son 6 los colores posibles; que son el Bu (Blue, azul); Bk (Black,negro); R (Red,rojo); G (Green, verde); Y (Yellow, amarillo) y por último W (White, blanco). La combinación de estos 6 colores da lugar a anillas únicas para cada ejemplar.


Como se muestra en la siguiente imagen, cada país dispone de un código de colores. Por ejemplo, Alemania tiene el azul, Finlandia el amarillo, Rusia el blanco, Suecia y Noruega el rojo, etc. Aunque con los años han tenido que ir combinando con otros colores para obtener nuevas combinaciones. A cada color también le corresponde un número. Al blanco(w) el 1, al amarillo(Y) el 2, al rojo (R) el 3, al azul (Bu) el 4, al verde (G) el 5 y al negro (Bk) el 6. Por lo tanto en una combinación como podría ser Bu-Bu-Bk/W-G-W, le correspondería la siguiente numeración 446151.
Para conocer los historiales de cada ejemplar, basta con saber las combinaciones de los colores presentes en las anillas.

 
El numero de ejemplares anillados es relativamente pequeño, uno de cada 400 ejemplares. Principalmente por dos motivos: 
Primero, por que, se tratan de aves nidífugas, es decir, que nacen con los ojos abiertos; a las pocas horas salen del nido ; a las 24 horas ya corren activamente; a los 3 días empiezan a picotear y a las 10 semanas ya son capaces de volar.
Segundo, si le añadimos que crían en zonas muy amplias, a veces cenagales y que las parejas de grullas están muy separadas unas de otras, incluso llegando a ser kilómetros, hace que sea más costoso el anillamiento de pollos.
 
 
Ahora que sabemos como se realiza la lectura de anillas, os mostramos los historiales de 4 ejemplares de grullas observadas en San Martin de Seignanx.
Primer historial :  Lectura de anillas Bu-Bu-R / R-Bu-G. De origen alemán, nacida en el año 2004. Se localiza por la zona por primera vez en el año 2007. Sus primeras 3 invernadas las pasa en Extremadura y en el año 2011 se localiza en San Martin de Seignanx con su pareja y un pollo sin anilla.

 
Segundo historial : Lectura de anillas Bu-Bu-Bk / W-G-W. Origen alemán, anillada el 10/06/2007. Vista por primera vez el 22/10/2007, con tan solo 4 meses de vida. En octubre del 2010 llega junto con un pollo anillado (Bu-Bu-Y / Bk-G-W,  el 26/6/2010). Este pollo vuelve los dos siguientes años. Este año todavía no ha sido observado. Es muy frecuente que los ejemplares jóvenes se alejen de las zonas de invernada de los adultos. 


 
Tercer historial : Lectura de anilla Bu-Bu-Bk / W-G-Y. Localizada el año pasado por primera vez. Carecemos por ahora de su historial, aunque parece que sea hermana de las anteriores, ya que sus anillas solo se diferencian en un color y siempre se las ve juntas.


 
Cuarto historial: Lectura de anilla W-Bk-W / Y-G-W. Origen Estonia, concretamente de Lahaku-Sacrenos. Anillada el 2/07/2005, por lo tanto tiene ya 9 años. Vista por primera vez en San Martin de Seignanx el 24/11/2005, con tan solo 4 meses.
En el 2007 fue localizado en Arjuzanx ; el 28/12/2008 en el centro de Francia y en el año 2010, exactamente el 6/01/2010 es observado en Badajoz. Prácticamente un mes más tarde, el 8/02/2010 se localiza el ejemplar en Aquitania.

Los historiales más antiguos son del 2001 y del 2002, las dos alemanas. La grulla nacida en el 2001 pasa el invierno en Arjuzanx. Mientras que la nacida en el 2002, pasa bastante desapercibida, por que no se tiene muchos datos de ella. Los años 2003 y 2004 los pasa en Gallocanta, los siguientes años no se localizada, y el 2006 y 2007 es observado en San Martin de Seignanx.
La mayor parte de las anillas proceden de Alemania, que es el país que más ejemplares anilla. Concretamente de Steinhofel y Parolowgotschendor. Hay alguna de la zona de Merklenburg-Vorpommern, concretamente de Neu Steinhorst, Bucholz y Friedrichhof.
Alemania es el país que más anilla, pero el país, donde más parejas de grullas crían es Rusia, seguida de Suecia, Finlandia, Polonia, Alemania, Noruega, Letonia, Estonia, Bielorrusia, Lituania, Ucrania, Turquía, Dinamarca, Armenia, Republica Checa, Georgia, Gran Bretaña, Francia, Rumania y Holanda.
Los datos de las anillas leídas, por nuestro compañero a lo largo de estos años, las hemos reflejado en esta grafica, que representa a los países de origen de las grullas observadas en esta zona de Aquitania.